Wildstorm, marcando estilo
Los Wildcats de Moore, Stormwatch etapa Ellis, Authority de Ellis/Hitch y Millar/Quitely, Planetary de Ellis/Cassaday, Point Blank y Sleeper de Brubaker con Colin Wilson y Sean Phillps… Y sin contar a la línea ABC comics cuando se publicaba bajo su sello…
Los tebeos mencionados han definido al género de superhéroes en lo que llevamos de siglo.
Como me gustaría darle la razón a Narbiz, como me gustaría decir que ha dado en el clavo y ha acertado de pleno, pero por desgracia… Si miramos la lista de colecciones que nombra son de tal calidad que evidentemente han tenido que definir el genero de superhéroes tal como lo conocemos. Pero la verdad es que si echamos un vistazo a lo que se edita en estos momentos o incluso un poco más atrás, cuesta ver un tebeo remotamente parecido. ¿Dónde ha quedado Authority? ¿Por qué no hay nada como Sleeper? ¿Y Tom Strong, acaso era malo? Nada de nada, cero.
Decia Alan Moore que con Watchmen y con Dark Knight, Miller y él casi destruyen a los superhéroes. Curiosamente no es por nada de lo que pensais, nada de profundos análisis psicológicos que dejan obsoletos al genero, nada de el cómic definitivo que deja sin sentido la publicación de más tebeos. Nada de eso. Moore explicaba que los autores de la época habían cogido los elementos más oscuros y violentos de su obra y a partir de ahí habían ido degenerando sus obras. Y si uno mira la época que vino después pues se le cae el alma al suelo, porque fueron los horribles 90. Y efectivamente en esos tebeos cada vez van proliferando más y más la violencia, las armas, los personajes extremos, los psicópatas como protagonistas. Justo todo lo que no pretendían ni Moore ni Miller.
Pues lo mismo con esos cómics de Wildstorm. En vez de coger el sentido de la maravilla, las grandes aventuras, los personajes carismáticos, se han quedado con la parte más tostonazo del mismo, el decompresive storitelling. Warren Ellis, tras comprobar de lo que es capaz Brian Hitch en Stormwatch, decide estructurar las historias de Authority en arcos de 4 números para aprovechar las mejores características del dibujante. Son historias que seguramente se podrían narrar en 2 números sin problemas pero Ellis decide que el tebeo puede quedar muy espectacular si se hace de esta manera. Pero cada cuatro números hay una historia completa con principio, nudo y desenlace. Es un decompresive controlado y con un limite claro y marcado por el guionista. Sin embargo el resto de autores lo cogió por donde quiso y poco a poco empezaron a alargar las historias a 6 números, luego a 8, a 12, a los que sea. Utilizan lo que un autor usaba como recurso narrativo para tapar sus propias carencias como guionistas y peor aún, con dibujantes bastante mediocres.
Cojamos por ejemplo Sleeper de Brubaker. Tenemos un trabajo meditado, con un ritmo pausado y con una historia planteada a largo plazo. Pero en cada número van contando cosas, desarrollando personajes, dando giros de guión. Es un tebeo cuyos arcos duran 12 números, pero se disfrutan mes a mes. El mismo autor años más tarde realiza el Capitán América y hace algo muy parecido a lo que hizo en aquella colección. Pero aquí los arcos se eternizan, los personajes dan vueltas sin llegar a ningún lado y a la historia le cuesta avanzar horrores. Cada número parece que respeta la esencia de aquel Sleeper, pero según va avanzando la historia, el tebeo de Wildstor queda muy lejos. Brubaker se contagia de esa manera de narrar aburrida que gobierna en la actualidad, ya que su Capitán América no desentona de ningún otro tebeo de la Marvel ¿Dónde quedo el autor que nos deslumbro en sus primeros años?
Y de los tebeos de Alan Moore para la línea ABC ya ni hablamos. Esos si que se han perdido en el olvido. No todos eran obras maestras pero Moore demostraba que se podían seguir contando historias interesantes utilizando los elementos de toda la vida. Nada, aquello no era el camino. Lo mejor era quedarse con lo molón de Authority y alargarlo hasta la extenuación, golpe de efecto a golpe de efecto. Y así nos va, que la mayoría de tebeos que se publican ahora mismo son absolutamente lamentables. Wildstorm marco estilo pero de la manera equivocada, pero no es culpa suya, sino de los patanes que vinieron después.
Más bien es responsabilidad de todos, creo yo.
– De unos autores que les resulta más cómodo caer en la repetición de modelos que aseguran explotar y desarrollar una misma idea durante un año (o más).
– De unos editores que han encontrado un modelo de negocio en el que así venden los mismos -o más- tebeos que antes.
– Y de unos aficionados que más allá de lamentarnos porque cualquier época pasada fue mejor seguimos acoquinando por completismo, cariño a los personajes o cualquier otra patología difícilmente entendible fuera de nuestro medio.
Lo peor de los tebeos malos es que nos acabamos acostumbrando a ellos todos y podemos llegar a hacerlos pasar por buenos a los aficionados más jóvenes.
Impacientes Saludos.
Gracias al aviso de frog2000 de que este diciembre sacan por fin el segundo tomo de Planetary, me he hecho ya con el primero, y mientras lo leo estaba pensando en lo mismo que expone Pedro:
¿DESCOMPRENSIVO? sí, hay una historia de fondo que se va desgranando poco a poco, atención al detalle y una narrativa relajada… pero además cada capítulo cuenta una historia propia, y puedes agarrar un número cualquiera sin sentirte absolutamente perdido.
¿COHESIONADO? también, hay referencias al resto del Universo Wildstorm, sobre todo a la propia Authority del mismo autor, pero de nuevo consigue una trama autónoma y nos sólo una pequeña pieza de un puzzle.
Definitivamente, no creo que aquellos tebeos hayan marcado al actual cómic mainstream. Más bien dieron el nuevo estilo con el que se logró para remontar la explosión de la burbuja especulativa comiquera de finales de los 90, desde el Marvel Knights como inicio del Quesadato hasta la primera mitad de la última década; pero durante el último lustro se ha renunciado a avanzar a partir de los nuevos esquemas, clonándose meramente su narrativa.
Avanzar más allá hubiera sido demasiado arriesgado comerciamente, en un raquítico mercado cada vez más subsidirario del cine cuya principal misión es mantener vivas y explotables sus licencias, aparte de más difícil creativamente. En cambio, se ha optado por alimentar en cambio una nueva microburbuja a base de crossovers encadenados, resurrecciones, cambios dramáticos de escenarios desaprovechados, portadas múltiples, interdependencia extrema entre colecciones antaño independientes, iconicidad forzada, planificación recopilativa desde el planteamiento argumetnal, efectismo a toda costa… incluso aunque algunos de estos elementos vinieran ya hererdados, en los últimos años se han impuesto editorialmente sobre la faceta creativa. Una burbuja ya no especulativa sino adictiva, que sólo busca atar al coleccionista yonki.
Aunque justo es reconocerlo, en el nuevo cambio de década hay también signos de que las propias editoriales están buscando el freno. Por no dejar a Quesada, baste comparar la dimensión y alcance de Asedio con los de Invasión Secreta, o la omnipresencia del Reinado Oscuro con las promesas de una mucho más abierta Edad Heroica.
Sleeper se podía contar perfectamente en la mitad de números. Claro que entonces se venderían la mitad de números.
A mí Sleeper se me hizo extremadamente adictivo (saqué los cuatro números de la biblio y no podía dejar la lectura). Sin embargo, comparto la opinión de Pedro con el Capi: como dijo Homer » me abuuuuuurrooooooo». Decompressive hasta la extenuación. Al principio no tanto, pero tras la «muerte» (ejem, ejem) del Capi la cosa degenera de mala manera.
Y, personalmente, creo que volvemos a estar en los 90 con héroes violentos y muchos muertos por doquier. Pero ojo, todavía más violentos que antes, porque antes sólo unos cuantos personajes eran psychokillers (y muchos creados en esa década). Hoy en día casi todos los héroes son asesinos violentos.
«- De unos editores que han encontrado un modelo de negocio en el que así venden los mismos -o más- tebeos que antes.»
Euhm…. mirad las listas de ventas. Yo no sé si en total Marvel o DC venderán más que antes en el conjunto de todas las series, pero individualmente las series venden una mierda.
http://www.icv2.com/articles/news/18551.html
Ventas de Septiembre. Lanzamiento de la renumeración estúpida de la serie de Lobezno desde un nuevo nº 1 (chorrada absurda porque luego tarde o temprano Marvel se sacará de la manga otra renumeración para poner la serie al nº 300 o el número redondo que sea que toque).
Tiene unas ventas de 104.000 ejemplares y en toda la lista no hay un sólo tebeo mas que supere los 100 mil.
En Mayo el lanzamiento de la serie actual de Vengadores renumerada vendió 163.000 copias.
Nos vamos a Septiembre y vende 87.000 o sea que en 65 meses (en realidad fue en menos tiempo) la serie pierde la mitad de los lectores y otro tanto le pasa a los de Brubaker, etc.
Antes una serie que vendiese 50.000 ejemplares estaba sobre la mitad o más abajo de la lista de ventas. Hoy te la encuentras en el puesto 15 y todas las series en el puesto 60 para abajo viven casi con ventas de cancelación.
Experimentos como los Jóvenes Aliados anunciados a bombo e «ilusión» se cancelan en su nº 6.
Una serie totalmente insípida y genérica de personajes que se juntan porque estaban en el mismo lugar y a la misma hora… y luego deciden seguir juntándose como grupo.
Lanzan series por lanzar, por quitar cuota de mercado a la competencia y luego no saben direccionarlas de forma interesante, se les queda en una serie genérica del montón y ala, a cancelarla en lugar de probar con otro equipo creativo con más ideas que el anterior.
Así que ¿qué modelo de negocio? si no fuera por el dinero que ganan de la parte de las adaptaciones cinematográficas (y un poco de parte de las ventas «un poco mejores» de Bendis y Johns), los imperios de Marvel y DC se vendrían abajo en dos días.
Error al teclear. No son 65 meses sino 5.
Pues yo si creo que el modelo se ha ido imitando, tanto con resultados buenos como malos. Lo que es cierto es que el mainstream puro y duro en seguida derivó por otros latres:
-AUTHORITY: Ultimate X-Men, The Ultimates, The Boys,
-PLANETARY: Anna Mercury (lo de la sangría es calcado), Umbrella Academy (con puntualizacione).
-TOM STRONG: Atomic Robo.
-SLEEPER:Iredeemable, Icorruptible.
Hay unos ejemplos más evidentes que otros, por supuesto. Pero sinceramente creo que el espíritu Wildstorm no ha muerto del todo.
Hay otro problema añadido, más bien dos.
Algún lumbreras americano decidió que para pasar la crisis había que subir los tebeos de 2,99 dólares a 3,99. Esta medida fue extremadamente impopular y muchisima gente dejó de comprar series.
Lo segundo es que al menos en Marvel parecen no saber dónde está el término medio.
Llegó Quesada y al principio empezó a eliminar series sobrantes, redujo los mutantes a 3 series, decretó que las resurrecciones restaban credibilidad así que los muertos se quedarían muertos y buscó primar la historia por encima de la continuidad, de este modo las series iban bastantes independientes unas de otras (llegando en miles de veces a contradecirse o ignorar cosas que estaban pasando unas de otras).
Pero un día eh aquí que Quesada y Bendis dijeron «Dissasemble» y empezó una vorágine de historia encadenada en forma de permacrossover contínuo que, aunque hace que todo sea muy dinámico, a la vez lo hace agotador.
Empezó poco a poco, se pervirtió durante Civil War y llegó a su extremo en Invasión Secreta (la cual si no fueron 500 comics con el cartelito de marras, pocos faltaron). Así Marvel da mucho… de poco.
No sé, pero a mi me parece tremendamente insano que durante una historia importante tengan que contar qué hacía en ese momento hasta Howard el Pato.
Pasamos de un universo desconectado a uno como bien dice Jata, con las series con extrema dependencia unas de otras.
Luego al final, lo mismo da que hagan un evento global o 6 minieventos simultaneos. Al final es todo complicadisimo y leyendo una serie no tienes la sensación de seguir una historia sino sólo un trozo de «algo indefinido», lo cual es desalentador.
Por no hablar de que es tremendamente complicado de seguir a muchos personajes. En los últimos años, para saber qué le ocurría al Doctor Muerte hemos tenido que seguir 16 series al estar metido en tantos fregados y aparecer por todas partes.
No contentos con eso, siguen complicandolo más y más. Antes cuando leías X Men y Patrulla X, si Lobezno se largaba a hacer algo lejos de su grupo tenían la decencia de coordinarse para que no apareciese en esas series. Hoy sale en 5 grupos, 5 minieventos, 3 series propias, 2 de su familia y aun lo meten de invitado en otras 8. Todo a la vez, da igual si tiene sentido o no y no es el único, que cada vez están multiplicando la omnipresencia de personajes en varios sitios.
¿Que tenemos ahora mismo? La Edad Heroica. Eso es una absurdez como una casa porque es volver a lo que había hace 10 años pero vendertelo como si fuese lo más de lo más. Pero claro, han creado un monstruo que necesita de eventos y post-eventos para poder rascar algo de ventas porque si no no se comen nada.
Así, las ventas van cayendo en picado y ahora no saben qué hacer para cambiarlo.
Así que despues de este tocho, en resumen ¿por qué? porque la gente se está agotando y los nuevos lectores no encuentran una forma cómoda de engancharse.
Sobre la proliferacion en exceso de titulos sobre un personaje ó familia. Despues que acabe «Bruce Wayne Retunr Home» seran 14 titulos de la Batfamilia sin contar especiales y miniseries. Batman Inc., Batman: The Dark Knight, Batwoman, Gotham City Sirens, Streets of Gotham, Detective Comics, Batman, Batman & Robin, Batman Confidencial, Azrael, outsiders, Batgirl, Birds of Prey y Red Robin.
De esta forma no consiguen atraer a nuevos compradores, creo Yo.