Mister K, pasaron los tres números de gracia
El numero 4 de cualquier colección suele dar la verdadera medida de una serie. Es tiempo suficiente para ver por donde van los tiros y si el producto merece la pena o no. También es un periodo de gracia, sobre todo en este caso, porque la iniciativa merecía un momento de pausa antes de afilar los cuchillos y lanzarse al ruedo. Mister K ha llegado ya a su numero 4, así que es el momento del degüello.
A todo hay que darle un tiempo. El principio no me gusto nada, el numero uno y dos de esta revista me parecían llenos de errores de concepto. El primero era el hacer una versión del jueves pero para niños. Cada página parecía hecha para la revista padre, cambiando todas las referencias sexuales y los chistes mas fuertes. Si le das a alguien esos primeros números arracandole la portada pensaría que esta leyendo un jueves un poco más ligerito que de costumbre. El gran problema era la falta de identidad, normal para unos principios. Por suerte en el numero 3 han enderezado el rumbo. La revista empieza a cobrar entidad, los personajes se hacen mas atractivos y se empieza a tratar a los lectores como personas inteligentes.
El problema mas grave que le veo a la revista es que trata a los jóvenes desde el punto de vista de los tópicos. Todos los números empiezan con siete u ocho páginas centradas en un tema que afecta a la chavalería de hoy en día, como los teléfonos móviles o tu habitación. Pues el repaso a los temas esto lleno de una cantidad de tópicos terribles. No todos los adolescentes tienen su habitación como su fuera una cuadra. Si uno lee la revista le da la impresión de que hacen acopio de calcetines usados para marcar su habitación con el olor, talmente como los perros. No. No todos los jóvenes
son iguales, no todos son unos cerdos, no todos son tontos. Son personas totalmente diferentes las unas de las otras, así que huyamos de los tópicos todo lo que podamos.
Sin embargo hay un autor que no conocía y que me ha sorprendido agradablemente por ser todo lo contrario a lo mencionado en el párrafo anterior. Su nombre es Carlos y sus viñetas son bastante transgresoras. Ha sido una jugada muy inteligente no meterlo en los primeros números porque tengo clarísimo que los padres se habrían sentido escandalizados ante sus contenidos, con razon. Sin embargo este tipo de autores es bastante necesario. No todo debe ser humor blanco y limpio,
todo el mundo necesita una dosis de humor negro y acido de lo que este autor es un buen exponente. Espero que siga trabajando durante mucho tiempo en la revista y que llegado el día recopilen su trabajo en bonitos tomos.
Otro gran personaje con mucho potencial es el de Harry Porrez. Es entretenido, tiene su gracia y le veo perfectamente recopilado en formato álbum. Lo que mas le favorece es que le dejen expandirse dentro de la revistas. Todas las historias son de una o dos páginas, mientras que las de este personaje alcanzan la tercera página en todos los números. Es otra cosa de las que no me gusta de esta revista, que una o dos páginas y fin. Hay que tener la mente un poco más abierta y dejas que algunas
historias se desarrollan según lo necesiten.
Y hasta ahí todo lo negativo. A cada numero la revista me gusta más y su precio sigue pareciéndome una ganga. Las historias están empezando a madurar y se hacen bastante entretenidas. El miedo se empieza a dejar de lado y darle cancha a un autor como Carlos o meter una historia llamada «como leer una revista porno sin que te vea» se empieza a convertir en algo cotidiano. Si señor. Los jóvenes son como tu y como yo, solo que más jóvenes. No nos de miedo pervertirlos un poco, que solo es un tebeo. Con valor, siempre con valor… Mira ahora mismo corro a la librería a comprarme el numero 5.
Algún día lograré que mi post del Lunes trate sobre «Mister K».
De momento ya tengo título para el post:
«No apto para mujeres»
yo hace 8 numeros o por ahi q no m la compro ami lla no m gusta